Explotaban a decenas de niños en campos de México

(ENTRAVISION/EFE).- En campos de Coahuila por lo menos 200 niños eran obligados a trabajar extenuantes jornadas laborales sin tener días de descanso; un total de 54 fueron rescatados. El gobierno del estado, ubicado al norte de México, informó que los menores, cuyas edades oscilan entre los 8 y 17 años, fueron rescatados de los ranchos […]

(ENTRAVISION/EFE).- En campos de Coahuila por lo menos 200 niños eran obligados a trabajar extenuantes jornadas laborales sin tener días de descanso; un total de 54 fueron rescatados.

El gobierno del estado, ubicado al norte de México, informó que los menores, cuyas edades oscilan entre los 8 y 17 años, fueron rescatados de los ranchos El Pedregal y Santa Cruz que pertenecen a la empresa Prokarne, propiedad de Óscar Lozano Chávez, y que están ubicados en el municipio de Ramos Arizope, los cuales fueron asegurados por las autoridades.

Los niños y adolescentes, en su mayoría originarios de Tamaulipas y Veracruz, que fueron rescatados se encuentran en albergues, pero las autoridades no especificaron que paso con el resto de los menores que se cree también eran explotados laboralmente.

La operación la llevaron a cabo autoridades encabezadas por la Procuraduría de las Niñas, los Niños y la Familia, la Secretaría del Trabajo y la Procuraduría General de Justicia del Estado, quienes detallaron que los menores eran reclutados a través de anuncios en los medios de comunicación y trasladados en camiones hasta esta entidad.

La detección de los menores se logró como parte de los operativos permanentes de supervisión y vigilancia que llevan a cabo las autoridades, según detalla el comunicado. Tres hombres que supervisaban las actividades fueron detenidos por estos hechos y se inició una investigación al respecto para deslindar responsabilidades, los acusados podrían enfrentar cargos por el delito de trata de personas.

De acuerdo con los testimonios de los niños, recibían una paga diaria de 100 pesos, un aproximado seis dólares,  por una jornada desde las 8 de la mañana hasta las 5 de la tarde, y la cual solo contemplaba dos comidas; la primera consistía solo en café y pan, y la segunda la recibían hasta las 6 de la tarde, el resto del día solo les ofrecían agua con sal, para evitar deshidrataciones.

La semana laboral era de lunes a domingo, día en que solo trabajaban hasta el mediodía; dormían en el suelo, en colchonetas ubicadas en galerones que están aledaños a sus áreas de trabajo. Para alrededor de 200 menores, la mayoría de sexo masculino, solo se contaba con dos baños, uno para mujeres y uno para hombres y dos áreas de duchas sin agua caliente.

(Fotografía: EFE)



Explotaban a decenas de niños en campos de México