El Vaticano hizo el comunicado este mes
(NOTICIAS YA).-La comunicad cristiano-católica del mundo se encuentra en shock luego de que el Vaticano diera a conocer, a través de un documento revelado a principios de este mes, que las "esposas de Cristo", las vírgenes consagradas, no deben ser necesariamente vírgenes.
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Las Vírgenes Consagradas, un grupo de creyentes en Cristo que dedican su vida y su eterna virginidad a Dios, se encuentran "decepcionadas" ante una nueva postura de la religión católica que, básicamente, desacredita la labor de muchas en su llamado a un camino de vida en la fe.
El Vaticano promulgó una nueva instrucción que dice que, para ser considerada una novia de Cristo, no es estrictamente necesario que la virginidad sea física. Si bien la virginidad física es importante y muy valiosa, su ausencia no imposibilita a una mujer llamada a convertirse en una virgen consagrada.
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Este comunicado, dice The Guardian, surgió a raíz de muchos arzobispos indicando que hay más mujeres "siendo llamadas a la vocación" de Cristo.
Las vírgenes consagradas son mujeres "casadas con Cristo", quienes dedican su vida a la oración, la penitencia y la castidad como un regalo a su esposo. A diferencia de las monjas, las vírgenes consagradas no viven en reclusión ni usan atuendo específico. La mayoría de ellas tienen empleo y proveen sus propios recursos.
Las Vírgenes Consagradas "están dedicadas al Señor en virginidad. Experimentan la fertilidad de una relación íntima con Dios".
Sin embargo, en el nuevo documento de 39 páginas promulgado por el Vaticano, donde se especifican sus funciones y preparación de dos años para ser consagradas, también se hizo el cambio que a muchas tiene indignadas pues sienten que demeritan su labor y eliminan la gracia que tenía ser consideradas con el título.
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La Asociación Estadounidense de Vírgenes Consagradas emitió un comunicado con su opinión ante la polémica nueva cláusula sobre su labor de fe. Aseguran que cuentan con 235 mujeres en su grupo y que todas están "sumamente decepcionadas ante la negación de la integridad virginal como una parte esencial de y natural de su vocación".
"Es impactante escuchar a la Madre Iglesia decir que la virginidad física ya no es considerada esencial como requisito para la consagración de una vida de virginidad", agregaron en el comunicado.
Las Vírgenes Consagradas se visten de novias en su ceremonia de consagración, misma en donde prometen lealtar, fidelidad y virginidad a Dios.
Theresa Jordan, consagrada virgen en Detroit en junio, junto con otras 4 mujeres, dijo que "es una promesa que hacemos de ser fieles a Cristo. Le prometemos nuestra virginidad como un regalo".