Pagó su fianza y se cortó un monitor de tobillo en mayo del 2017
(NOTICIAS YA).- Un farmacéutico de Colorado, está prófugo de la ley luego de ser acusado de facturar fraudulentamente a Medicaid y Medicare con 7.8 millones de dólares.
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George Sackey de 63 años, fue acusado en el Tribunal del Distrito del condado Arapahoe con un cargo de robo de más de 1 millón de dólares y otro por robo de computadora de más de 1 millón de dólares.
De acuerdo a la Oficina del Fiscal de los Estados Unidos en Denver, Sackey les daba a sus clientes en sus farmacias de Aurora y Denver cremas para el dolor genéricas que sus empleados facturaban al gobierno como medicamentos de marca que nunca eran entregados.
Los cargos fueron presentados el 15 de febrero del 2017, pero salieron a la luz esta semana cuando la Oficina del Fiscal de EE.UU. en Denver, presentó una demanda de decomiso contra la casa de Sackey en Highlands Ranch y varias cuentas bancarias que suman un valor de más de 1.2 millones de dólares.
Las autoridades capturaron a Sackey por primera vez en febrero del 2017 en el Aeropuerto Internacional de Denver, pero pronto pagó una fianza y fue liberado con un monitor de tobillo.
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Sackey llevó a cabo sus presuntas estafas de medicamentos recetados para el dolor en dos farmacias, Havana Pharmacy y Medical Supply entre el 2012 y el 2017, según documentos federales.
Un exempleado de Havana Pharmacy, dijo que les dio a los pacientes medicamentos genéricos mientras facturaba a Medicaid y Medicare por marcas más caras como Abilify y Nexium.
El hombre también continuaba suministrando medicamentos a los pacientes después de que sus recetas se vencieran. El informante también dijo que Sackey falsificó firmas de pacientes para seguir facturando a las agencias del gobierno.
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Sackey afirmó que usaba capsulas de ketoprofeno, la única manera en que Medicare y Medicaid pagarían por el medicamento, pero en realidad usaba polvos que se guardaban en bañeras grandes para hacer su propia crema para el dolor, según el documento.
El documento también dice que las farmacias de Sackey ni siquiera tenían las capsulas en el almacén.
Un empleado dijo a los investigadores que las farmacias de Sackey no cobraban copago a los clientes, de esa manera no tenían que entregar un recibo que indicara la cantidad de medicamentos que recibieron.
Sackey no ha sido visto desde que pagó su fianza y se cortó un monitor de tobillo en mayo del 2017.
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