Un poderoso terremoto de magnitud 7.1 agitó edificios y causó grietas en las calles del Sur de California en la noche del viernes 5 de julio; causando terror en los residentes que habían experimentado otro sismo justo el día anterior. LEE: Sismo de 6,4 sacude el sur de California El epicentro del sismo del […]
(NOTICIAS YA).- Un poderoso terremoto de magnitud 7.1 agitó edificios y causó grietas en las calles del Sur de California en la noche del viernes 5 de julio; causando terror en los residentes que habían experimentado otro sismo justo el día anterior.
LEE: Sismo de 6,4 sacude el sur de California
El epicentro del sismo del viernes fue a 11 millas del noroeste de Ridgecrest. La Encuesta Geológica de EE.UU reportó que éste fue 5 veces más grande, 11 veces más fuerte y duró más tiempo que el temblor de magnitud 6.4 que se registró el jueves 4 de julio, también cerca del área de Ridgecrest.
En promedio, en el sur de California se ha registrado una réplica por minuto desde el terremoto del viernes. El sismo causó fuegos debido a fugas de gas, rompimiento de tuberías y pérdida de electricidad y medios de comunicación en algunas áreas. Además se reportaron varios heridos.
Trona en San Bernardino, un pueblo de 2,000 habitantes, se encuentra sin energía eléctrica, ni agua; por lo que alrededor de 130 residentes de esta área y Bakersfield se están quedando en un albergue temporal.
Hasta el momento no se han reportado grandes fugas de gas ni muertes ocasionadas por los sismos, pero los servicios de emergencias han recibido llamadas solicitando ambulancias y asistencia médica.
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El área de Los Ángeles, ubicada a unas 150 millas del sur de Ridgecrest, experimentó movimientos en la tierra pero no se reportó ningún daño severo. Aunque algunos cables se cayeron y la electricidad se fue en algunas zonas.
El terremoto fue tan severo que se sintió en partes de México y Las Vegas. Esto ocasionó que el juego del viernes de la Liga de Verano de la NBA entre los Pelicans de Nueva Orleans y los Knicks de Nueva York, fuera pospuesto. Al momento del temblor, el movimiento sacudió los marcadores y altavoces en la arena que se encontraban cerca del techo.
La sismóloga de CalTech, Lucy Jones, dijo que los dos terremotos son parte de una secuencia activa de “un sistema muy energético”. Según Jones, el sismo de magnitud 7.1 del viernes fue el principal, mientras que el de magnitud 6.4 del jueves fue el previo.
Más terremotos podrían ocurrir, por lo que el centro de operaciones de emergencia en California ha sido activado en el nivel más alto. Se recomienda que los residentes tomen precauciones como aprender las medidas de seguridad, ubicar los puntos de reunión y tener provisiones de comida y agua.