
Ahora tendrá la oportunidad de seguir salvando la vida de muchas más personas al cumplir su último deseo y donar sus órganos.
(NOTICIAS YA).-Familiares y amigos de Xaven García, recuerdan al joven de 17 años como un héroe. El adolescente de Albuquerque que muriera hace unos días después de entrar corriendo a su casa mientras esta ardía en llamas, solo para asegurarse de que todos los miembros de su familia estuvieran a salvo.
Xaven salvó a su padre, quien dormía mientras el domicilio se incendiaba el domingo por la noche. Ahora tendrá la oportunidad de seguir salvando la vida de muchas más personas al cumplir su último deseo y donar sus órganos.
"Es un héroe para todos nosotros, él me salvó", dijo Phil García, padre de Xaven.
"El obtuvo su licencia apenas esta semana y quería convertirse en donante, me preguntó al respecto y yo le dije que eso era una gran idea", continuó.
Aunque su padre nunca imaginó que Xaven donaría sus órganos a los pocos días de esa plática, cuando un calentador portátil incendiara su casa.
"Lo único que me despertó fue que me gritaba ´Papá sal. La casa está en llamas´. Me agarró y me sacó de la casa, yo quedé sin aliento por el humo que había dentro".
Al percatarse que su hermana ya había estado en casa ese día y sin saber si se encontraba aún dentro, Xaven ingresó corriendo de nuevo.
Pero esta vez, nunca salió.
"Le dije que se quedara aquí pero no hizo caso. Supongo que corrió hacia la parte de atrás, el vecino lo vio entrar y le gritó que no lo hiciera" dijo Phil.
"El departamento de bomberos lo encontró probablemente 20 minutos después, estuvo en el humo de 20 a 30 minutos. Cuando lo sacaron, prácticamente había fallecido".
Los días siguientes fueron una pesadilla para su familia, esperando alguna respuesta positiva mientras permanecía con soporte vital.
Los médicos declararon su muerte el martes por la tarde, sus padres ahora se enfocan en cumplir su último deseo, donar sus órganos.
"Para hacer que otra persona tenga una vida, lo está haciendo por ellos, es un verdadero héroe"
Xaven era estudiante de último año en Valley High School, era aficionado a las computadoras, andar en patineta y pasar tiempo con su familia. Sus seres queridos esperan que la gente lo recuerde por siempre intentar ayudar a los demás.
"Sigue ayudando a la gente sabes, es una bendición y nos enorgullece".
El Hospital de la Universidad de Nuevo México le realizó un "pasillo de honor" a Xaven, con su familia y el personal médico, mientras su cuerpo era escoltado al quirófano para la donación de órganos.