Larry Pérez también deberá pagar una multa de 3 millones de dólares para reponer lo que robó a empresarios.
(NOTICIAS YA).- Un hombre que se dedicaba a estafar a empresarios restauranteros ha sido sentenciado a pasar más de un año en prisión y pagar una cuantiosa multa por sus delitos.
De acuerdo con el fiscal general del estado, Phil Weiser, Larry Pérez se aprovechaba de personas que querían poner su propio negocio de comida, muchos de ellos inmigrantes.
De acuerdo con la emisora local KDVR, el hoy detenido cobraba fuertes cantidades a los empresarios por construirles estos camiones-restaurante, y luego les entregaba un trabajo deficiente o, en ocasiones, nada.
Pérez, propietario del negocio Denver Custom Food Trucks, despojaba a sus clientes de sus ahorros y, cuando estos protestaban, los amenazaba con violencia, describe Weiser. Se cree que podría haber más víctimas que no han alzado la voz.
La orden de un tribunal ya le había exigido a Pérez que dejara de vender food trucks debido a que estaba defraudando a sus clientes.
Sin embargo, el hombre continuó con la actividad, ahora desde el negocio de su padre, ubicado en el norte de Denver.
El padre también recibió una multa de 75 mil dólares por ayudar a su hijo a violar la orden del tribunal.
Además de los 18 meses tras las rejas, Pérez está obligado a pagar 3 millones de dólares para reponer lo que robó a empresarios.
Weiser calcula que Pérez seguirá debiendo la mayor parte de dicha cantidad cuando salga de prisión.
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