
Cuando dio cuenta de que un hombre armado estaba disparando dentro del Club los instintos de su entrenamiento militar se activaron
(NOTICIAS YA).-“Es el reflejo. ¡Vamos! Ve al fuego. Detener la acción. Detener la actividad. No dejes que nadie salga lastimado. Traté de traer a todos de vuelta”, dijo este lunes Richard FIerro afuera de su casa en Colorado Springs. Fierro es uno de los dos hombres a los que la policía atribuye haber salvado vidas al someter a Anderson Lee Aldrich de 22 años quién disparó el sábado por la noche en el Club Q, donde la comunidad LGBTQ se reunía cada semana en Colorado Springs.
Fierro estaba allí con su hija Kassy, su novio Raymond Green Vance, de 22 años y varios otros amigos para ver un espectáculo de "Drag Queens" y celebrar un cumpleaños. Fierro, dijo que fue una de las noches más agradables del grupo, hasta que comenzó el tiroteo. Dice que cuando el y otro nombre se acercaron al tirador agarró el chaleco antibalas del atacante y comenzó a golpearlo mientras que el otro hombre, Thomas James, comenzó a patearlo. El sospechoso tomó una pistola, pero Fierro se la arrebató. También le dijo a James que pateara el rifle semiautomático AR-15 para alejarlo del tirador.
Cuando un artista que estaba allí para el espectáculo de drag pasó corriendo, Fierro les dijo que patearan al pistolero. El artista colocó un zapato de tacón alto en la cara del atacante y también trató de someterlo, dijo Fierro.
La esposa de Fierro, Jess, dijo a través de Facebook que su esposo se había lastimado el costado derecho y lastimado las manos, las rodillas y el tobillo. “Estaba cubierto de sangre”, escribió en la página de su cervecería, Atrevida Beer Co..
El tiroteo masivo dejó cinco muertos y al menos 17 heridos por disparos. El sospechoso, de quien se dijo que portaba varias armas y cargadores de municiones adicionales, enfrenta cargos de asesinato y delitos de odio.
El jefe de policía de Colorado Springs, Adrián Vásquez, dijo el lunes que Fierro actuó con valentía. Fierro dijo que no recuerda si el pistolero respondió mientras gritaba y luchaba por someterlo, pero ha pensado en su próxima interacción.
“Voy a ver a ese tipo en la corte”, dijo Fierro. “Y ese tipo va a ver quién lo paró”.
