Hispanos podrían verse afectados si consumen medicamentos que solo han sido evaluados en otra raza.
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(Entravision) – Cada medicamento o tratamiento clínico debe ser examinado antes de estar a la venta al mercado, este es uno de los requisitos que le exige la Administración de Alimentos y Medicamentos, conocida en sus siglas en inglés como FDA, a las casas farmacéuticas.
Para llevar a cabo el estudio se solicita que animales y humanos sean pacientes voluntarios en ensayos clínicos y así comprobar la efectividad y descubrir si existen efectos secundarios en los medicamentos. De acuerdo a la FDA, solo el 1% por ciento del 16% por ciento de hispanos que viven en los Estados Unidos se someten a este tipo de evaluaciones, dato que preocupa a expertos, quienes aseguran que a pesar de que un medicamento este a la venta después de haber sido aprobado, podría tener efectos diferentes en hispanos, sí el medicamento se estudió solo en la raza blanca.
La importancia de la participación latina en los ensayos clínicos es primordial, la dieta, edad y sexo, no es lo único que interfiere en la reacción de cada medicamento, la etnicidad también es importante. Los Institutos Nacionales de la Salud, no ocultan que hubo fatalidades en algunos estudios, pero también resaltan el lado positivo de estos procedimientos, asegurando que en los últimos 40 años la mortalidad por enfermedad cardiovascular en los Estados Unidos, ha disminuido en un 70% por ciento, dando como resultado una dramática reducción de la primera causa de muerte.
Quienes estén interesados en ser pacientes voluntarios deberán saber que todo estudio clínico tiene un protocolo para llevarse a cabo, cada participante será informado del pro y contras que podría sufrir al momento de someterse a una prueba. A veces, se solicitan solo hombres o mujeres, de edad o enfermedad determinada o una persona saludable, dependiendo del tratamiento que se quiere evaluar. En los Estados Unidos, los ensayos clínicos, debe tener un Consejo Institucional de Revisión, quienes serán los encargados de asegurar que el estudio sea ético, además tienen como deber proteger los derechos y el bienestar de los voluntarios y asegurar que los riesgos son razonables comparados con los beneficios potenciales.
Toda evaluación es diferente y hay quienes están "negociando con la vida", para ganar dinero extra, mientras otros, lo hacen con el objetivo de salvar al mundo con el descubrimiento de nuevos tratamientos.