El bullying o acoso escolar, sigue siendo una problemática diaria, que desafortunadamente ya cobró la vida de un pequeño en el Condado de San Diego.
“No se ni lo que siento ya, pero eso es un ejemplo mi niño, ya no lo tengo conmigo, me lo quitaron y espero que el que hizo todo lo que hizo, y que le quitó la vida a mi niño, se arrepienta algún día y pague más que nada.” Comentó Eunice Ríos, mamá de Salvador.
Estas son las palabras de una madre desconsolada, quien sufre la repentina muerte de su hijo Salvador Ríos, mejor conocido como “chavito”, quien, a sus 14 años de edad, era un hijo, hermano y amigo, y será recordado por muchos como un niño risueño, y divertido, pero sobre todo lleno de muchos sueños.
“En un punto quería ser una celebridad, se ponía sus sacos bien extravagantes, se ponía sus shortcitos, sus blusitas. Para la película de Barbie, se fue como una barbie, se miraba, mi niño se miraba bonita.” Dijo Eunice.
Desafortunadamente, el sueño de chavito de ser una celebridad, le fue arrebatado, cuando decidió quitarse la noche del 15 de agosto, cuando fue encontrado muerto en la casa de un familiar, después de quitarse la vida, a solo horas de que una publicación en redes sociales sobre él, se hiciera viral.
Al parecer el acoso era contra su sexualidad, pues su mamá dice que después que se declara públicamente gay, fue acosado en sexto grado en la escuela Marston. El acoso llegó a tal grado que, en una ocasión, los ataques por parte de otros estudiantes llegaron hasta los golpes.
“Me lo golpearon, me lo agarraron entre muchos y me lo golpearon, y él no dijo nada, porque mi hijo nunca decía nada, sino él se volteaba, pero si me lo tenían amenazado casi como un mes.”
A pesar de que Eunice se quejó con la escuela ante esta situación, dice que las autoridades no hicieron lo suficiente para detener el brutal acoso escolar que sufría Salvador, y ahora como consecuencia de esta falta de acción, su hijo está muerto.“Yo creo que se avergonzó en su momento, pensó que había hecho lo más malo del mundo. A lo un poquito que yo sé, cosas de su sexualidad, él era gay, pudo haber expuesto cosas de su privacidad.” Agregó Eunice.
Su familia dice que Salvador tenía un corazón de oro y era amable con todos los que lo rodeaban, incluso tenía muchos amigos y estaba a punto de iniciar clases este lunes 21 de agosto en la escuela Stanley Middle School, con la cual intentamos ponernos en contacto, pero aún no hemos obtenido respuesta.
Y mientras esperamos respuesta del Distrito Escolar de San Diego sobre este caso, la madre de Salvador, solo espera una cosa.
“Solo quiero justicia para mi hijo, quiero justicia.”
Amigos y familiares, habilitaron una cuenta de GoFundMe para recaudar dinero para los gastos fúnebres de Salvador.
La señora Eunice y su familia, esperan que, a través de su dolorosa pérdida, se pueda crear conciencia sobre los peligros del acoso y abuso escolar. Y de esta forma, evitar más tragedias como esta.